Crónica: "LA VIDA A PUÑO ALZADO"

A Julio Carrión, más conocido como “Karry”, la vida le ha dado miles de sorpresas y se la sigue dando. Perdió a dos de sus seres más queridos en el 2005, el mismo año que ganó el primer premio internacional de Cartoons. Hace unos días fue homenajeado por su trayectoria y participación en distintos medios de comunicación, a cargo de la Universidad Alas Peruanas.

De piel trigueña, un metro setenta centímetros de estatura, nariz prominente, contestura delgada, cabello castaño oscuro y lacio, así es Julio Ángel Carrión Cueva, “Karry”, aunque dice que de ángel no tiene nada. Es un caricaturista con más de veinte años en el ambiente artístico, que ha participado en diferentes medios de comunicación.

Nace en 1959, en Lima, en el populoso barrio de La Victoria; donde dice que sobrevivía él más astuto, el más avezado. Su familia siempre fue parrandera, su mamá era la alegre, divertida y siempre con la chispa; por otro lado, su padre era el conservador, le gustaba la música clásica y prefería la tranquilidad de su hogar. Karry dice que es la combinación de estas dos personalidades, por eso cuando necesita estar solo, lo hace sin medir el correr del tiempo; pero cuando necesita el contacto con las personas, las busca y se relaciona con ellas.

En su adolescencia, Julio era muy enamoradizo. Cuando terminó la secundaria, entró a estudiar al Instituto Cesca, porque su padre quería que se prepare para estudiar en la Universidad y ser un gran ingeniero. Un día, en plena clase, Karry caricaturizó a su profesor, y cuando éste se dio cuenta de la situación lo llevó a la dirección. Obviamente, Karry ya se imaginaba expulsado del instituto, pero allí la sorpresa fue mayor: al ver su caricatura, el director del centro le obsequió una beca para estudiar arte y diseño. Fue esta travesura la que, digamos, le cambió la vida.

En 1978, entró a trabajar a la revista erótica “Cosquillas”, y al poco tiempo decide lanzar una revista también erótica pero independientemente. También participó en el semanario Monos y Monadas en la segunda época, pero lo deja porque dice que Nicolás Yerovi (director del Semanario) como todo empresario le importaba más la cantidad y que costará poco, que la calidad. Entonces, empezó a trabajar en distintos lugares, como ayudante de dibujante y otros más. En los años 90, ingresa a trabajar al diario Ojo y allí nace Karry.
Al principio en cada caricatura que realizaba firmaba como Carrión, pero sus compañeros de trabajo Crose y Cayo (también caricaturistas) le recomendaron que cambiara su seudónimo por “Karry”, y así lo hace y Carrión pasa a ser Karry.

La técnica que utiliza para realizar una caricatura tiene varios pasos. Primero se alimenta de lo que encuentra en la calle, en los diarios, en la vida misma; luego, clasifica las noticias más resaltantes del día. Después, empieza el dibujo a mano, para lo cual utiliza un block -que no deja ni a sol ni a sombra. Finalmente, escanea su dibujo para convertirlo en digital y le da los últimos retoques por la computadora.

Cada dibujo lleva una filosofía y un mensaje. Sus caricaturas son su forma de expresión, es arte en sus manos; por medio de los dibujos refleja lo que la gente quiere saber, las posturas y opiniones que se dan con respecto a los temas de escándalo. Para realizar una buena caricatura, se tiene que estar actualizado sobre los temas de coyuntura, también en contacto con los jóvenes, su forma de hablar y el lenguaje propio de la edad.

Los momentos más tristes de su vida, los vivió en el 2005. Su mamá estaba un poco enferma desde tiempo atrás, pero Karry jamás pensó que podía perderla tan pronto. En enero de ese año ella partió, y él entró en un momento muy difícil de su vida le era difícil imaginar la vida sin ella. Pero lo peor estaba por venir; seis meses después, perdió a su segunda esposa, la mamá de sus gemelos, a causa de un aneurisma, que se originó por la presión alta que siempre la aquejaba.
En ese momento, Karry tomó conciencia de que había perdido a las dos mujeres más importantes de su vida en el mismo año, a pocos meses una de la otra. Se sentía morir, pero antes de pensar en echarse al abandono, tenía dos grandes motivos por el que seguir adelante: sus gemelos, que tenían tan solo seis meses.

Pero no todo es tristeza. El 2005 también fue su mejor año, pues ganó el primer premio Internacional “Terapia Humoral 2005”, convocado por: Facultad de Medicina de Lleida, España. No pudo ir a recibir el premio, por los sucesos contados anteriormente, pero fue un representante a recibir su premio. Aunque parezca frívolo este premio también lo ayudó a salir adelante, porque se dio cuenta que su trabajo era reconocido internacionalmente y que tiene razones por las que salir adelante.

Hace dos años, con la colaboración de Dante Alfaro, Karry publica una serie de historietas en torno al problema del agua potable en Perú. Estas caricaturas han sido compiladas en un solo volumen y presentadas este año en la Expo Zaragoza, y con el auspicio de la Unión Europea han sido traducidos al inglés, italiano, francés, noruego y español. El 7 de octubre pasado, la Universidad Alas Peruanas organizó un Simposium sobre "El humorismo gráfico en la formación de la opinión pública", en donde se le dio un reconocimiento por su trayectoria y participación en distintos medios de comunicación, como en el diario Expreso, Ojo, y actualmente en Perú21 y Trome. Otros artistas homenajeados fueron Don Julio Fairlie, Don Carlos Rose Silva (Crose) y Don Nicolás Yerovi.

Por último, su mayor sueño es vivir en una casa grande que tenga una piscina en medio, pero con toda su familia; que su oficina esté allí, pero que no sea en el Perú, para poder trabajar con total libertad. Como consejo, me dice que nunca debo dejar algo para mañana, si lo puedo hacer o decir hoy día. Así lo haré.